Por Ramón Colombo/FOGARATE

De regreso, desde el remoto planeta California hacia este reguero de islas, paso por Charlottesville, y a lo lejos Monticello, el inmenso latifundio de Thomas Jefferson, la conciencia más preclara de Estados Unidos, antes de que deviniera en insoportable imperio. Sí, Jefferson estadista, el de las ideas más progresistas puestas por él mismo en la primera Constitución de un país del que fuera tercer líder supremo. Sí, Jefferson humanista, el primero que condenó la esclavitud, por ser “crimen abominable”…Y, sin embargo, nunca renunció a su condición de esclavista. (Sí, Jefferson fue derrotado por el implacable sistema social que él mismo fundara).