Por Ramón Colombo/FOGARATE

Créalo quien todavía no lo sepa: El Jefe de la Policía Nacional (eso de “Director” todavía no me cuadra, pues no es lo mismo ser “jefear” que “dirigir”) ha dispuesto que todos los agentes, en todos sus rangos y especialismos, vayan a misa cada semana. No creo conocer algo más cómico que eso… ¿Se imagina un policía en el confesionario, ante un cura pidiéndole que confiese sus pecados? ¿Se imaginan al cura cuando aquél le confiese todos los abusos que ha cometido, incluyendo las cabezas rotas a puros macanazos? ¿Se imaginan que uno que otro pida un por ciento de lo que se recoja entre los feligreses?… (¡Qué tremendo invento!).