SANTO DOMINGO, RD. – En un hecho que confirma su expresado interés de ser recordado como el presidente que transformó el Estado dominicano, Luis Abinader presentó este miércoles la propuesta de reforma constitucional para la recomposición del Consejo Nacional de la Magistratura, la reorganización del funcionamiento de las altas cortes, así como garantizar la independencia del Ministerio Público y el fortalecimiento de los órganos de control interno y externo.

Al encabezar la mesa del Diálogo Nacional con el fin de discutir las reformas para impulsar la transparencia y modernización del Estado, el mandatario solicitó, además, la confirmación de la mesa de trabajo para discutir esta propuesta.

Acompañado de la vicepresidenta, Raquel Peña; los ministros Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza y de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez; el consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, Antoliano Peralta; el viceministro Administrativo de la Presidencia, Andrés Lugo y el subconsultor Jurídico del Poder Ejecutivo, Pedro Luis Montilla Castillo, el mandatario recordó que su discurso del pasado 18 de agosto, donde destacó que cambiar el país es una tarea conjunta y que requiere diálogo, audacia y generosidad por parte de todos y todas.

«Una democracia son sus instituciones y la calidad del debate que en ellas se produce, y en estas mesas de diálogo que proponemos formar para conversar, discutir y acordar sobre un conjunto de reformas que consideramos útiles para nuestro país, está la clave de la democracia a la que aspiramos», planteó.

El gobernante destacó que esta es una democracia que delibera, respeta al adversario, busca el acuerdo en beneficio de sus representados y construye un país más fuerte para las generaciones futuras.

«Y por eso es por lo que estoy aquí. Para implicarme en las soluciones, escuchar y proponer», enfatizó.

El presidente Abinader destacó que el fortalecimiento de la transparencia pública mediante la paulatina formulación de un marco normativo progresivo y coherente, así como la continua modernización de las herramientas con las que cuenta el Estado para el cumplimiento de sus fines, son una consecuencia lógica de los artículos 7 y 8 de la Constitución.

Estos artículos, agregó, establecen el respeto de la dignidad humana como fundamento del Estado y la protección de esta a través de los derechos fundamentales como su función esencial.

«Impulsar estas transformaciones ha sido una de nuestras principales propuestas y hemos priorizado su cumplimiento», dijo.

Citó como ejemplos la creación de la comisión de liquidación de órganos del Estado, la adscripción de numerosos órganos que estaban bajo la presidencia de la República a los entes que realmente corresponde, como Medio Ambiente, Administración Pública o Salud Pública, entre otros.

Además, la creación de un Programa de Cumplimiento Regulatorio en las Contrataciones Públicas y de Comités de Seguimiento de las Contrataciones Públicas; la aprobación de un Plan General para la Reforma y Modernización de la Administración Pública y más recientemente la promulgación de leyes como la que regula las aduanas o la Ley de Simplificación de Trámites y Mejoras Regulatorias.

«Ahora bien, este proceso de tan especial relevancia para nosotros no se detiene en las decisiones que hemos venido tomando desde la Presidencia, sino que implica transformaciones más profundas, en las que debe participar toda la ciudadanía en el marco de un ejercicio democrático robusto», puntualizó Abinader.

Señaló que las transformaciones apuntan a cambios normativos amplios, cuyas propuestas serán presentadas en el seno de este consejo en el momento que resulte oportuno, como ocurre con la transformación del sistema de controles de la Administración Pública.

Por eso, añadió, la Consultoría Jurídica del Poder Ejecutivo y las instituciones involucradas presentarán las propuestas para reformar las leyes que regulan la Cámara de Cuentas, la Contraloría General de la República y el sistema de compras y contrataciones públicas.

«Pero estas reformas no serán una imposición nuestra, sino el resultado de un esfuerzo colectivo de la nación dominicana, en el que su liderazgo ha sabido poner a un lado las posturas que nos distancian para trabajar en aquellos temas que tanto se necesitan», precisó.

Transformaciones en la justicia

En este sentido, indicó que se están proponiendo una serie de importantes transformaciones en el ámbito de la justicia, con la formulación de una ley que revolucione la jurisdicción administrativa y la convierta en una verdadera garantía en manos de los ciudadanos.

Igualmente, la prometida transformación del Ministerio Público, adecuando su funcionamiento para concentrar su atención en la persecución contra la criminalidad y avanzar con ello en el fortalecimiento de un estado de derecho para todas y todos.

«Esta causa, la de un Ministerio Público verdaderamente independiente que no dependa de la voluntad del presidente de turno, ha sido abrazada por la mayoría de la población dominicana», sostuvo.

También, el fortalecimiento de la independencia del Ministerio Público, mediante una transformación constitucional que le otorgue total independencia del Poder Ejecutivo y de los demás poderes del Estado, delimitando también sus funciones, especializándolo en la investigación y persecución de los hechos punibles.

El mandatario consideró que estas transformaciones no pueden materializarse en toda su dimensión sin una Reforma Constitucional que abarque, principalmente, elementos como la reformulación del Consejo Nacional de la Magistratura, excluyendo del mismo al Procurador General de la República.

Asimismo, la reorganización del funcionamiento de las altas cortes, para que sus jueces estén ligados a un régimen de ingreso, permanencia y alternancia más riguroso.

Además, la consolidación del ejercicio democrático a través de mejoras puntuales al sistema electoral, relacionadas principalmente con la organización de las Asambleas Electorales y el fortalecimiento del Tribunal Superior Electoral y la Junta Central Electoral.

Expuso que la consolidación de los órganos encargados del control externo e interno de los fondos públicos, son la Cámara de Cuentas y la Contraloría General de la República.

Reforma a la Constitución

«Y por eso he venido hoy ante ustedes, para agradecerles en primer lugar su respuesta al llamado a diálogo y para presentarles, como acabo de hacer formalmente y en primera persona, nuestra propuesta para la Reforma Constitucional», expuso el presidente Abinader.

Subrayó que es una idea que se circunscribe exclusivamente a mejoras orgánicas del Estado y donde el Poder Ejecutivo, lejos de querer fortalecerse a sí mismo, extiende su mano para fortalecer el sistema de controles, frenos y contrapesos.

«Es nuestro deseo que a partir de la misma y bajo la coordinación del Consejo Económico Social se conforme la mesa de trabajo correspondiente, que se discuta la mecánica de cómo el producto de esta será presentado a la ciudadanía y consensuado», significó.

El mandatario dijo que con esto se busca, que el ejercicio democrático en este debate sea un reflejo del fortalecimiento institucional que procuramos con esta reforma.

«Desde luego, aunque mi presencia aquí en el día de hoy obedece principalmente a la presentación de esta propuesta, de la que hago formal depósito de un documento introductorio para su discusión, ello no resta importancia al debate de las demás reformas que serán objeto de discusión», indicó.

Abinader informó que para el inicio de los debates los representantes del gobierno entregarán hoy a este consejo el documento introductorio para la discusión de cada reforma.

Adelantó que conforme a los acuerdos arribados hoy entre los participantes y las orientaciones que ofrezca el Consejo Económico y Social, el Poder Ejecutivo presentará propuestas normativas y administrativas más detalladas, pero privilegiando siempre la construcción conjunta de la idea y no la imposición de nuestra propia agenda.

«Espero que con esta primera visión de los temas a discutir y las propuestas iniciales sobre los mismos, se determinen tan pronto como sea posible los acuerdos metodológicos de rigor y con ello pueda iniciarse un diálogo en el que toda la República Dominicana se beneficie», confió.

Planteó que este debe ser un diálogo en el que los representados puedan ver el valor que tienen sus preocupaciones y en que se evidencie una vez más, que son muchas más las cosas que los unen que las que los separan.