colombia farc1Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) piden la asignación directa de escaños en el Congreso como una condición para su transformación en movimiento político.

El grupo guerrillero estableció este sábado la lista de condiciones para convertirse en una organización política, una vez que se firme el acuerdo de paz que negocian en La Habana desde 2012 con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

En un comunicado leído por «Victoria Sandino» (alias de Judith Simanca), el grupo guerrillero formuló varios requisitos que encuadran en sus «diez propuestas mínimas» formuladas en octubre pasado para garantizar el fin del conflicto.

En el texto proponen lo que denominan tres propósitos esenciales, de los cuales el primero es garantizar su participación activa en la política abierta.

Para ello, piden la asignación directa de curules «en el Congreso de la República durante al menos dos períodos, así como en Asambleas Departamentales y Concejos Municipales en lugares de comprobada presencia e influencia por iguales períodos».

Adicionalmente, las FARC proponen que se les dote de una «protección constitucional contra la extradición».

«Justicia restaurativa»

En su comunicado, las FARC insistieron en promover y apoyar «procesos organizativos sociales» que provean de servicios de salud, trabajo, vivienda y seguridad social a «todos y cada uno» de los integrantes del grupoguerrillero.

«Es condición necesaria del proceso de normalización de la vida nacional y la transformación de las FARC en organización abierta, una solución confiable en lo que concierne al tema de justicia especial para la paz», afirmó «Sandino».

Estos arreglos deberán fundamentarse en los principios de «la justicia restaurativa», extensivo a «prisioneras y prisioneros políticos y de guerra condenados o con procesos de trámite», señalaron en el comunicado.

Las FARC y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos iniciaron el pasado martes un nuevo ciclo de diálogos con el reto de avanzar hacia una tregua bilateral antes de fin de año, la cual prepararía el camino para el acuerdo final que según el plazo propuesto, podría firmarse antes de finalizar marzo de 2016.

Un desafío al proceso de paz

«A lo largo de los tres años de negociaciones ambas partes han hablado públicamente de exigencias, sugerencias, propuestas, que no necesariamente se han materializado; estas conversaciones han resultado fluidas y para saber exactamente qué se ha consensuado no hay más que esperar los acuerdos formales», dijo el corresponsal de BBC Mundo en Colombia, Natalio Cosoy.

«Pero ni siquiera cuando hay acuerdos firmados eso garantiza que la interpretación de las partes sea la misma, como en el caso del de Justicia, difundido semanas atrás, en el que las FARC interpretaron que la privación de la libertad sería algo más laxo que lo interpretado por el gobierno».

«Esto no deja de ser un profundo desafío para el proceso de paz», agregó el corresponsal.

RedacciónBBC Mundo