Héctor Eduardo Pichardo Hernández, habla con su abogado previo la lectura de la condena.

SANTO DOMINGO.- El Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenó a 10 años de prisión a uno de los cinco acusados de la muerte del coronel de la Policía Julián Suárez Cordero, durante disturbios en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), el 23 de abril del 2013. Los restantes fueron descargados por insuficiencia de pruebas de acuerdo al veredicto emitido la noche de este viernes.

La sentencia condenatoria contra Héctor Eduardo Pichardo Hernández fue leída a las 7: 55 de la noche de este viernes, quien deberá cumplir la condena en la cárcel Najayo Hombre.
El tribunal asumir como válidos los testimonios ofrecidos que lo señalaban como el responsable de la muerte del oficial.
El tribunal descargó por insuficiencias de pruebas a Wilson Javier Daciel Nicasio, Diógenes Gutiérrez Medina, Eddy Bonilla Cabrera y Víctor Alfonso González Hernández y ordenó el cese de las medidas preventivas en su contra. La Policía y la Fiscalía acusaron a los dirigentes del Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (Felabel) y a un buhonero de la muerte del oficial.
Pichardo, fue declarado culpable de violar entre otros artículos del Código Procesal Penal 295, 804 y 239 que tipifica homicidio voluntario en perjuicio de Julián Suarez Cordero por lo que se le condena a 10 años de reclusión.
Con relación a los demás acusados, la jueza ordeno “el cese de la orden de medida de coerción impuestas y quedan libres inmediatamente, por lo que ordenamos su inmediata libertad”.
Dante Castillo, representante del Ministerio Público, mostró su inconformidad con el fallo y de inmediato anuncio que recurrirá en todas sus partes la leída sentencia.
Tomas Castro, abogado de sentenciado  Héctor Eduardo Pichardo Hernández, informó que el 11 de julio, “tras finalizar la lectura de la sentencia, interpondrán un recurso de apelación a favor de su defendido”.
“Aquí no hay justicia, nuestras pruebas no fueron apreciadas de manera adecuada por eso vamos a recurrir, los elementos probatorios no fueron analizados conforme al principio de racionalidad de interpretación.
Tras la lectura del fallo, iniciada a las 7:00 de la noche, los familiares del fallecido coronel Julián Suarez Cordero irrumpieron en llantos y desmayos, previas acusaciones contra el Sistema Judicial, de que “no hay justicia, ni castigo para los culpables de la muerte de su padre”, dijo la hija antes de desmallarse.
Desde las primeras horas de la tarde, tropas antimotines de la Policía Nacional fueron apostadas en las inmediaciones y en los pasillos del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva en prevención de incidentes.